Sigo impresionado por este video.
Creo que Bowie se lo imaginó ‘algo así’ cuando concibió la letra. *sigh* Algún día me tocará ver el disco de la tierra.
Nací a los treinta y tres años, el día de la muerte de Cristo; nací en el Equinoccio, bajo las hortensias y los aeroplanos del calor.
Tenía yo un profundo mirar de pichón, de túnel y de automóvil sentimental. Lanzaba suspiros de acróbata.
Claro, es de Huidibro.
Sigo impresionado por este video.
Creo que Bowie se lo imaginó ‘algo así’ cuando concibió la letra. *sigh* Algún día me tocará ver el disco de la tierra.
No estoy seguro que esté o que he estado en este puente hoy, ayer, la semana pasada, el año pasado… Lo que si se es que en este momento con gusto lo haría, ya traigo la maleta y los tenis allá atras, la playera, los chors, y de una vez podría matar 2 pájaros de un tiro: hago esa carrera pendiente de 28 kilómetros sudando la camiseta a cada paso y llego a casa antes que toda esta bola de weones.
¿Y el auto?
Ese se cuida solo. No sería la 1° vez que se lo llevan al corralón.
Además, correr de noche es bien bonito.
Y aunque a últimas fechas no hemos tenido días de mucho viento, por la pocilga empiezan a volar las motas de polvo y pelo cuando uno se asoma hacia adentro.
“Eco eco eco eco eco….”
Hace algunos posts recuerdo haber prometido el ansiado regreso del dueño de las quincenas de todos ustedes, público conocedor, pero ¿qué creen? que todo parece tomar un tinte más negro, ai nomás al son de
…me ausentaré de la casa de los trinos hasta nuevo aviso
y si eso es de tan famoso espacio de letras e ideas, ¿qué será de nosotros?
¿Hasta cuándo la orfandad?
Entre que si regresa y no, pues en siguientes entregas, vertiré algunos pasajes del deporte de los jadeos y los tenis gastados, y la inevitable cercanía de un siguiente compromiso maratónico en la ciudad luz.
Y esperamos que regrese, porque…
Bueno, salud y carnitas para todos.
Las esperas siempre son difíciles.
Sobre todo aquellas que son inciertas,
en las que no se sabe qué va a pasar.
“Así como para cuándo, joven”.
Y es pregunta.
Obvio sin respuesta.
Tic tac tic tac…
Tic tac tic tac…
¿Ya? ¿ya? ¿ya ya ya ya ya ya?
Changos. Entre el tuiter y la neurosis colectiva, la gente vive boca abajo.
Ya, por favor.
Ya.